FAUNA ASTURIANA

Aves de Asturias, Aves de los Bosques
Más del 30 por ciento del territorio del Principado de Asturias está cubierto por bosques, muchos de ellos de extraordinaria belleza y poblados por una gran variedad de aves.
La mayoría de nuestros bosques presentan un excelente estado de conservación y en muchos casos están formados por árboles autóctonos. En Asturias podemos encontrar hayedos, robledales, abedulares, carbayeras, encinares, bosques de ribera, bosques mixtos...
El bosque de hayas es la formación arbolada más típica del paisaje montañoso asturiano. En la Cordillera Cantábrica los hayedos se encuentran por encima de los 800 metros de altitud. Entre los más conocidos están el hayedo del Monte Peloño, en el Municipio de Ponga, y el Bosque de Pome, en el macizo occidental de los Picos de Europa.
Otro de los bosques más frecuentes en Asturias son los robledales, de hecho contamos con el mayor robledal del país, el Bosque de Muniellos, que cuenta con más de 5000 hectáreas y fue declarado en el año 2000 por la UNESCO como Reserva de la Biosfera.
Los bosques mixtos son los formados por robles, castaños y abedules. Son masas forestales de arbolado autóctono bastante extendidas en muchos concejos de Asturias, aunque está disminuyendo su número debido a la gran tala de árboles para reutilizar el terreno como pastos o para cultivos.
Arrendajo (Glayu).

Habita generalmente en bosques, en lugares cercanos a cursos de agua. En ocasiones también se le encuentra en pequeñas arboledas, campos con frutales e incluso en jardines y parques urbanos.
Su dieta se basa en semillas, tallos, insectos, frutos secos, gusanos y hasta pequeños roedores. Tiene por costumbre esconder comida para la época invernal entre la corteza de los árboles, entre las raíces o en el suelo.
Sitúa su nido en la parte baja de la maleza o en los árboles a no demasiada altura. La puesta tiene lugar en primavera y tanto el macho como la hembra participarán en la cría y alimentación de los poyuelos.
Herrerillo (Veranín azul).

Está presente en casi todos los bosques hasta los 1200 metros de altitud. A veces también vive en zonas de campo abierto con matorrales, zarzas y maleza.
Se alimenta de semillas, brotes de los árboles, insectos, fruta, etc.
Esconde el nido en huecos de paredes, muros y árboles, y pone entre ocho y diez huevos a finales de abril. Es sedentario en sus territorios de cría.
Paloma torcaz (Palombu bravu).

Le gustan los lugares arbolados para vivir, por eso frecuenta las zonas boscosas, tanto en llanuras como en colinas.
Su alimentación es variada, fundamentalmente materia vegetal como semillas, granos de cereal, yemas de plantas, bayas y hierbas, aunque también come pequeños invertebrados, insectos, gusanos...
Suele moverse en grupo. Nidifica en los árboles, entre los meses de abril y septiembre.
Chocha perdiz (Arcea).

Es un ave de costumbres solitarias que frecuenta zonas húmedas, especialmente en bosques con abundante arbolado y matorral.
En el crepúsculo comienza su actividad en busca de alimento, que se basa en insectos, lombrices, larvas, gusanos, escarabajos... que encuentra hurgando con su largo pico bajo la tierra o entre la hojarasca.
Nidifica en el suelo, en un hoyo forrado con hojas.
Agateador común (Esguilón).
blancas, y las partes inferiores blancuzcas. La cola es larga y escalonada, de color pardo rojizo, y el pico es largo y curvado.
Es una especie sedentaria, abundante en zonas forestales que se caractericen por ser bosques con árboles viejos, en los que se le observa a menudo subiendo y bajando por los troncos.
Se alimenta durante todo el año de los insectos y arañas que busca entre la corteza de los troncos y ramas gruesas, ascendiendo en espiral desde la base del árbol.
Nidifica en los troncos de árboles a baja altura sobre el suelo, en grietas profundas que encuentra bajo la de corteza, siempre a cubierto de la intemperie. Inicia la reproducción a finales de marzo.
Pito real (Picatuero, picaniellu).
Aunque se le encuentra en espacios abiertos, generalmente prefiere los árboles, especialmente los castaños, robles, hayas, abedules y cerezos. Frecuentemente golpea con el pico los troncos y la corteza, pero no tamborilea como hacen otros pájaros carpinteros.
Come insectos, larvas y huevos, sobre todo de hormigas, que obtiene deshaciendo los hormigueros y la madera de los troncos.
Construye el nido haciendo un agujero bastante profundo de unos seis centímetros de diámetro. En él la hembra pone de cinco a siete huevos en el mes de mayo.
Pito Negro (Picafayes).

Es sedentario y su hábitat más frecuente son los bosques de hayas y abetos, aunque a veces también vive en robledales y pinares. La masa forestal le proporciona abundantes troncos muertos donde buscar los gusanos, insectos y larvas de los que se alimenta. Se le encuentra desde los 900 hasta los 1600 metros de altitud.
Aunque es difícil de ver es fácil oír su tamborileo, que se escucha a gran distancia. Anida en una cavidad grande en un tronco o en una rama de un árbol muerto, excavando un nuevo agujero cada año con su fuerte pico.
Pico Picapinos (Tucutucu).

Vive en toda clase de bosques, especialmente de hayedos y robledales. Es característico su tamborileo fuerte y repetido, como una ráfaga de ametralladora.
Es un ave solitaria que pasa casi todo el día en los árboles en busca de larvas, gusanos e insectos escondidos bajo la corteza, que captura gracias a su larga y pegajosa lengua. También come piñones, bellotas, fruta e incluso hormigas.
Trepador Azul (piquetín).

Habita en bosques de especies caducifolias con árboles viejos, preferentemente en zonas montañosas, aunque también puede vivir en pinares de montaña y en parques con árboles centenarios.
Pasa la mayor parte del tiempo trepando por los árboles en busca de insectos y arañas bajo la corteza. En invierno también se alimenta de granos, nueces, hayucos, bellotas, avellanas...
Nidifica en marzo o abril aprovechando algún hueco de árbol, reduciendo el tamaño de la entrada con barro si es muy grande.
Aguila culebrera.

Ocupa áreas forestales arboladas, donde se instala para criar, y paisajes abiertos, donde puede cazar.
Su presas favoritas son las serpientes, en especial las culebras, de ahí su nombre. Las engulle comenzando por la cabeza y no importa que sean venenosas pues sus patas tienen fuertes escamas para protegerse de las mordeduras. También come pequeños mamíferos, reptiles, ranas...
Sitúa su nido en la copa de algún árbol, normalmente no muy alto, y pone un solo huevo.
Azor (ferre).

Habita en bosques de coníferas, pinares... Aprovecha los linderos y los calveros para cazar y las copas de los árboles más altos para hacer su nido. Rara vez sale a campo abierto.
Es un gran cazador, ágil y rápido. Realiza vuelos rasantes, muchas veces entre la arboleda, para sorprender a sus presas: conejos, ardillas, perdices, cuervos... En invierno puede acercarse a los pueblos para atacar a gallinas y palomas.
Ratonero.

Su hábitat más frecuente son los bosques, aunque siempre deben tener cerca espacios abiertos que cuenten con zonas arboladas para poder cazar en ellos.
Suele posarse en postes desde los que observa los campos y los claros de los bosques a la espera de alguna presa: pequeños mamíferos como ratones y topos, y también aves, reptiles, lombrices, orugas, escarabajos...
Construye un nido grande con ramas en algún árbol y, ocasionalmente, en bordes rocosos. Realiza la puesta durante los meses de abril y mayo.
Gavilán (Ferre).

Es predominantemente forestal y habita tanto en bosques de llanura como de montaña. En invierno es también habitual en zonas arboladas próximas de los pueblos.
Es un ave diurna que caza volando bajo a gran velocidad para capturar principalmente otras especies de aves, así como también pequeños mamíferos e insectos.
Construye su nido en la copa de un árbol en el mes de abril.
Urogallo (Faisán, gallu de monte).
Es la gallinácea más corpulenta de Europa. Los machos tienen la cabeza, el cuello y la cola negros con reflejos azul verdosos en el pecho, con una mancha roja sobre los ojos y el pico es de color marfil. Las hembras tienen un plumaje rayado y moteado de pardo, negro y gris, con el pecho castaño rojizo.
Vive en zonas boscosas de cierta altitud con hayas, robles, abedules, acebos y arandaneras. En Asturias los cantaderos, los lugares desde los que intenta atraer a las hembras, se ubican en hayedos.
Se alimenta de los brotes tiernos de haya, flores de plantas, larvas, insectos, hojas de acebo, arándanos, escaramujos, bellotas, etc.
Es sedentario y llega a vivir hasta 20 años. Su situación en la Cordillera Cantábrica es crítica por la escasez de ejemplares.
Cárabo (Coruxu).

Vive siempre en las proximidades de los árboles y se le encuentra en bosques tanto caducifolios como mixtos o de coníferas.
Pasa el día en el hueco de un tronco o en una rama, donde se mimetiza perfectamente con el entorno. En el crepúsculo comienza su actividad y caza pequeños mamíferos roedores e insectívoros y pequeñas aves. Se traga sus presas enteras.
Hace su nido en la cavidad de un tronco, en una roca o en un edificio abandonado, en febrero o marzo.
Autillo (Coruxín).

Es un ave migratoria que pasa los meses invernales en África y regresa en primavera. Frecuenta bosques y arboledas, y durante el día permanece inactiva camuflada entre las ramas de algún árbol gracias a su plumaje.
Durante la noche caza al acecho posándose en una rama desde la que espera la aparición de alguna presa: insectos, coleópteros, escarabajos, saltamontes, ratones...
Construye su nido en agujeros de árboles y en nidos viejos.
PRECIOSOS, GRACIAS
ResponderEliminarMuchísimas gracias, me ha valido mucho tu información...👏👏
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